Neodenticula seminae es una planta microscópica que desapareció del Atlántico Norte hace 800.000 años. Sin embargo, un estudio recién publicado informa de su reaparición en esta zona, lo que constituiría la primera migración trasatlántica de los tiempos modernos en lo referente al plancton. Los autores postulan que la desaparición de hielo polar habría facilitado el paso de esta planta microscópica desde el Pacífico a través del Océano Ártico, al haber dejado paso franco a esta diminuta alga por el Polo Norte.
Neodenticula seminae es una planta microscópica que desapareció del Atlántico Norte hace 800.000 años. Sin embargo, un estudio recién publicado informa de su reaparición en esta zona, lo que constituiría la primera migración trasatlántica de los tiempos modernos en lo referente al plancton.
Este descubrimiento es fruto del proyecto CLAMER («Resultados de una investigación sobre el cambio climático y los ecosistemas marinos»), financiado a través del tema de Medio ambiente del Séptimo Programa Marco (7PM) de la Unión Europea con más de 990 000 euros.
Los autores postulan que la desaparición de hielo polar habría facilitado el paso de esta planta microscópica desde el Pacífico a través del Océano Ártico, al haber dejado paso franco a esta diminuta alga por el Polo Norte.
Pese a servir como fuente de alimento, los ecologistas no son optimistas ante su retorno. Temen que cualquier cambio en la base de la cadena trófica marina acabe por perjudicar a la flora y la fauna del Atlántico.
Científicos de la Fundación de Oceanografía Sir Alister Hardy (SAHFOS, Reino Unido) advierten que «este desplazamiento geográfico podría alterar la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas marinos del Ártico y del Atlántico Norte».
También destacan que la migración de N. seminae coincide con la llegada en 2010 de una ballena gris del Pacífico avistada cerca de las costas de Israel y también de España. Se trata de una ballena extinta en el Atlántico desde hace 300 años, probablemente por efecto de una caza excesiva. Los entendidos opinan que la menor cantidad de hielo en el Ártico habría permitido a la ballena cruzar del Pacífico al Atlántico Norte y desde allí llegar hasta el Mediterráneo.
Esta información se desprende de una serie de informes acerca de las alteraciones que se están produciendo en la flora y fauna marinas del Atlántico Norte a raíz del cambio climático; CLAMER se dedica a recopilar y catalogar los hallazgos correspondientes.
Fuente: Cordis