Las praderas marinas son hábitats muy importantes para las zonas costeras: sirven de refugio de juveniles de peces y crustáceos; forman parte de la dieta de peces y aves acuáticas; producen oxígeno y fijan dióxido de carbono; protegen la franja costera ya que sus raíces impiden erosión del sedimento y sus hojas oponen resistencia a olas y corrientes marinas; mejoran la calidad del agua marina (filtro de materiales en suspensión); sirven de soporte para algas y moluscos, etc.
En la costa vasca, encontramos praderas de la especie Zostera noltii, actualmente incluida en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas como En Peligro de Extinción.
Sus hojas son largas y estrechas y como fanerógama que es (no hay que confundirlas con algas) produce flores (aunque poco llamativas) y frutos marrones de unos 3mm.
Actualmente sólo hay praderas en 3 estuarios de la costa vasca: el del río Oka, Lea y Bidasoa, aunque en el pasado se sabe que también hubo en el Nervión y Oiartzun.
El estudio genético de las tres poblaciones que quedan demuestra que no colonizan otros estuarios, por lo que su desaparición en alguno de ellos es prácticamente irreversible a no ser que artificialmente se intervenga.
Por ello, en AZTI-Tecnalia se realizaron experimentos para comprobar la viabilidad de repoblar un estuario a partir de poblaciones de otro estuario.
Se extrajeron cuadrados de fondo arenoso del estuario del Oka para transplantarlos al del Butrón y Urola en diversos experimentos entre 2009 y 2012.
Y se transplantaron así:
Al cabo de 6 meses, los resultados mostraron que en el estuario del Butrón, el transplante de Zostera noltii crecía y se extendía más allá de los cuadrados transplantados, por lo que se comcluyó que puede ser un estuario adecuado para su supervivencia.
Sin embargo, los datos de los experimentos realizados en el Urola no fueron concluyentes.
A partir de estos resultados preliminares, las próximas tareas a acometer en este proyecto serán:
-Realizar un seguimiento más prolongado de los transplantes, para observar cómo evolucionan
-Ampliar la superficie de las praderas actuales y hacer pruebas de transplante en otros estuarios: transplantes a gran escala
-Intentar la repoblación a partir de semillas
-Conservar las praderas actuales, insistiendo en la concienciación y educación y señalando las actividades que más impactan en su hábitat: fondeaderos y marisqueo.