Los científicos del Censo de Vida Marina publican en la revista PLoS One un inventario de la biodiversidad y distribuciones de especies marinas conocidas y nuevas en 25 regiones desde la Antártida hasta el Ártico. Los más de 360 investigadores que han participado en su elaboración en los últimos diez años documentan en este inventario la vida marina y resaltan todo lo que queda por conocer en los océanos. El censo, que destaca que la biodiversidad del Mediterráneo es la más amenazada, será la base para medir los cambios futuros.
Los científicos del Censo de Vida Marina publican en la revista PLoS One un inventario de la biodiversidad y distribuciones de especies marinas conocidas y nuevas en 25 regiones desde la Antártida hasta el Ártico. Los más de 360 investigadores que han participado en su elaboración en los últimos diez años documentan en este inventario la vida marina y resaltan todo lo que queda por conocer en los océanos. El censo, que destaca que la biodiversidad del Mediterráneo es la más amenazada, será la base para medir los cambios futuros.
Las aguas australianas y japonesas, que albergan respectivamente casi 33.000 especies con nombre científico, entre las que destaca el tiburón blanco (Carcharodon carcharias), son las que acogen mayor diversidad. Los océanos de China, el Mediterráneo, y el Golfo de México completan las cinco áreas con mayor diversidad de especies conocidas. Los inventarios de Indonesia, Madagascar y el mar de Arabia están aún en fase de elaboración y pendientes de ser entregados.
Los crustáceos, el grupo más numeroso
Según los 360 científicos del Censo, que publican el inventario en PLoS One, el número total de especies animales y vegetales conocidas y con nombre asignado oscila entre 2.600 y 33.000, con una media cercana a 10.750. Estas especies pertenecen a una docena de grupos taxonómicos. Una quinta parte de las especies son crustáceos (19%) que, junto con los moluscos (17%) y los peces (12% incluyendo a los tiburones), constituyen cerca de la mitad de todas las especies conocidas en las distintas regiones.
El resto son “otros invertebrados” (5%) y “otros vertebrados” (2%) que incluye a ballenas, leones marinos, focas, aves marinas, tortugas y morsas. Esto demuestra que algunos de los animales marinos más conocidos sólo representan una parte mínima de la biodiversidad marina.
Cuando se presente el 4 de octubre la última estimación del Censo en Londres (Inglaterra), es probable que la cifra supere las 230.000 especies, ya que muchas de ellas aún deben incorporarse al Registro Mundial de Especies Marinas (que cuenta con una lista de 185.000 especies marinas) y al Sistema de Información Biogeográfica (OBIS), que reúne más de 30 millones de registros de proyectos y 800 bases de datos.
Nuevas especies y especies por descubrir
Según Marta Coll, investigadora en el Centro Mediterráneo de Investigaciones Marinas y Ambientales (CMIMA) del CSIC, quien ha dirigido el trabajo de síntesis sobre biodiversidad marina del mar Mediterráneo, las investigaciones han permitido descubrir hasta la fecha 1.200 especies marinas nuevas para la ciencia. A estas se añaden las especies aún no descritas que se estima que representen del 39% a 58% en la Antártida, el 38% en Sudáfrica, el 70% en Japón, el 75% en las aguas profundas del Mediterráneo, y más del 80% en Australia.
Sin embargo, un estudio recientemente publicado en la revista Zootaxa, demostraba que aún quedan por descubrir y describir cerca de 5.000 especies de peces marinos (el doble de los que se han descrito en los últimos 19 años), con un total estimado de cerca de 21.800 especies de peces marinos en todo el mundo.
Los científicos del Censo de la Vida Marina han combinado la información generada en los últimos siglos con datos obtenidos durante el censo, iniciado en el año 2000. El trabajo permitirá orientar las decisiones futuras para la investigación en aguas poco exploradas.
Fuente: SINC