Se dijo que era insumergible y sin embargo, a unos cuatro kilómetros de profundidad bajo el Atlántico descansan desde hace casi 100 años los restos del Titanic, uno de los barcos más famosos de la historia, que ni siquiera logró completar su primera travesía. El amasijo de hierros y madera será estudiado por los científicos del Instituto Oceanográfico de Woods Hole (WHOI, del inglés) de EEUU a partir del 18 de agosto, quienes también se ocuparán de recrear un mapa tridimensional que “prácticamente rescate el Titanic”.
Se dijo que era insumergible y sin embargo, a unos cuatro kilómetros de profundidad bajo el Atlántico descansan desde hace casi 100 años los restos del Titanic, uno de los barcos más famosos de la historia, que ni siquiera logró completar su primera travesía. El amasijo de hierros y madera será estudiado por los científicos del Instituto Oceanográfico de Woods Hole (WHOI, del inglés) de EEUU a partir del 18 de agosto, quienes también se ocuparán de recrear un mapa tridimensional que “prácticamente rescate el Titanic”.
La tumba submarina permanecerá inalterable, dado que el equipo de científicos no recogerá artefactos sino que se limitará a erigir una versión virtual del casco partido en dos y a crear un mapa de los escombros, todo ello gracias a tecnologías sónar, óptica de alta resolución y cámaras de fotografías y vídeo en 3D.
Durante las casi tres semanas que durará la travesía, los científicos también podrán comprobar cómo se ha degradado la embarcación desde que se descubrió en su tumba acuática, hace 25 años.
Fuente: Público