La flota artesanal vasca comprende un conjunto de algo más de 100 embarcaciones ocupando a un gran número de marineros y armadores. En la actualidad, se trata de una actividad económica poco o nada diversificada fuera de lo que representa el ámbito de la pesca, por lo que la adopción de determinadas medidas sobre ella tiene un elevado impacto socio-económico para esta flota. A pesar de la importancia de las pesquerías artesanales al nivel biológico, ecológico, social, cultural y económico, la información precisa sobre su estado global necesita ser incrementada. En particular, gracias al proyecto BATEGIN (BAses TEcnicas para el aseGuramiento de la sostenIbilidad de la pesca costera de País Vasco en base a una planificación Espacial mariNa) se está obteniendo información de la flota a nivel espacial así como de las interacciones de esta flota con otros usos (pesqueros u de otro tipo) en el limitado espacio del litoral.
Este conocimiento servirá de base para las futuras propuestas de ordenación y gestión del caladero en el marco de la Planificación Espacial Marina. Las nuevas normativas europeas, como la Directiva Marco de la Estrategia Marina Europea (2008/56/EC), la Comunicación de la Comisión Europea, de 2008, sobre Planificación Espacial Marina, o la Política Pesquera Común, inciden en la necesidad de que las actividades en el medio marino estén basadas en el principio de sostenibilidad y la gestión por ecosistemas, haciéndose compatibles mediante una planificación adecuada de los diferentes usos que tienen lugar en nuestros mares.