Hasta la fecha se podía prever el clima con seis meses de antelación… pero como si de aumentar la apuesta se tratara, investigadores de Francia y Estados Unidos afirman haber descubierto una forma de realizar predicciones climáticas a largo plazo que no sólo son válidas para más de un año, sino que probablemente sean las mejores que se han realizado nunca. El estudio, publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), anuncia la capacidad de prever el clima incluso con doce meses de antelación.
Hasta la fecha se podía prever el clima con seis meses de antelación… pero como si de aumentar la apuesta se tratara, investigadores de Francia y Estados Unidos afirman haber descubierto una forma de realizar predicciones climáticas a largo plazo que no sólo son válidas para más de un año, sino que probablemente sean las mejores que se han realizado nunca. El estudio, publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), anuncia la capacidad de prever el clima incluso con doce meses de antelación.
Sin embargo, no hay que caer en el error de confundir predicciones climáticas -considerablemente más generales- con las meteorológicas a corto plazo, pues las primeras no predicen temperaturas concretas en ciudades determinadas. En resumen, la meteorología cubre un periodo de días, mientras que el clima hace referencia a periodos de tiempo superiores al mes. Seguiremos, por tanto, sin saber muy bien con mucha antelación si lloverá o no o si bien nos hará falta llevar abrigo.
El estudio desvela que las previsiones a largo plazo podrían contribuir a que los científicos realicen predicciones mucho más avanzadas de fenómenos provocados por ejemplo por El Niño. Estos se caracterizan por cambios en la temperatura de la zona tropical oriental del Océano Pacífico (conocidos como El Niño y La Niña en función de si la temperatura aumenta o disminuye respectivamente) y en la presión atmosférica sobre la superficie de la misma zona. Estos eventos provocan fenómenos meteorológicos extremos como inundaciones y sequías en distintas regiones del mundo cada dos años de media.
Para este estudio, seevaluaron las temperaturas de la superficie del mar de todo el mundo. Utilizaron 50 años de datos climáticos y predicciones experimentales de forma retrospectiva, incluidos datos climáticos entre 1950 y 1970, para realizar «predicciones» desde enero de 1971 en adelante. Con ello pretendían también comprobar la precisión de las predicciones. De hecho obtuvieron predicciones precisas 16 meses más allá de lo que otros científicos habían logrado en la mitad tiempo.
Fuente: http://cordis.europa.eu