Las ballenas de Groenlandia pueden oler el aire, algo que no había sido advertido hasta ahora. El hallazgo podría cambiar nuestra comprensión de cómo las ballenas sin dientes localizan a sus presas, ya que los científicos sospechan que las ballenas de Groenlandia olfatean los bancos de krill.
Las ballenas de Groenlandia pueden oler el aire, algo que no había sido advertido hasta ahora. El hallazgo podría cambiar nuestra comprensión de cómo las ballenas sin dientes localizan a sus presas, ya que los científicos sospechan que las ballenas de Groenlandia olfatean los bancos de krill.
Si bien hasta ahora se creía que las ballenas y los delfines no podían oler, el sentido del olfato de las ballenas salió a la luz cuando unos científicos disecaron sus cuerpos y encontraron órganos olfativos uniendo el hocico y el cerebro, así como los receptores de proteínas necesarias para el olfato.
El profesor Hans Thewissen, del Colegio de Medicina de la Universidad del Noreste de Ohio, hizo el descubrimiento en conjunto con sus colegas de Japón y Alaska mientras evaluaban el tamaño del cerebro de las ballenas de Groenlandia (o ballenas boreales).
El estudio, que se han publicados en la revista Marine Mammal Science, asegura que, a diferencia de la mayoría de las ballenas, las de Groenlandia tienen fosas nasales separadas, lo cual sugiere que pueden ser capaces de sentir la dirección de donde proviene un olor particular.
Esto también podría significar que la contaminación humana, que enmascara los olores del océano, también podría afectar a esta especie en peligro de extinción.
Fuente: BBC